Al agregarlos a hamburguesas, ensaladas y platos de pasta, enriquecemos las comidas con color y un agradable sabor dulce. Están llenos de vitaminas, nutrientes y tienen un efecto antioxidante. Los tomates son parte indispensable de las comidas de verano entre mayo y octubre, y además tienen numerosos beneficios para la salud.
Pensando en ello, a continuación, compartimos los principales efectos en nuestro cuerpo de comer tomates:
Contenido
1. Los tomates reducen el riesgo de daños en la piel por el sol
Los tomates están llenos de carotenoides, un tipo de antioxidante que protege la piel del daño solar,.
En un estudio de 2017, se afirma que el consumo regular de tomates puede prevenir las quemaduras solares y así reducir el riesgo de tumores causados por la dañina radiación UVB.
2. Los tomates mejoran el estado de ánimo
Además de realzar el sabor de su comida, mejoran su estado de ánimo a largo plazo. Un estudio de 2019 encontró que los participantes que comían tomates de dos a seis veces por semana tenían un 46 % menos de probabilidades de reportar síntomas leves o graves de depresión en comparación con los que comían tomates menos de una vez por semana. Además, es interesante que otras verduras utilizadas en el mismo estudio no produjeron este efecto. Los investigadores no están seguros de qué nutrientes están causando este efecto, pero creen que podrían ser los antioxidantes, incluido el licopeno.
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3. Los tomates pueden causar problemas digestivos
Sin embargo, los tomates no son para todos. Su consumo podría provocar síntomas como acidez estomacal, hinchazón o problemas digestivos en personas que padecen reflujo.
Los tomates frescos están repletos de ácidos cítrico y málico que tienden a aumentar el ácido estomacal. La ingesta frecuente de tomates frescos aumenta la producción de jugos gástricos, por lo que quienes tienen problemas de reflujo no deben exagerar su consumo.
4. Los tomates ayudan con la absorción de nutrientes
Los tomates ayudan a la absorción de nutrientes de otros alimentos. Ayudará a tu cuerpo a absorber el hierro , un mineral que juega un papel clave en la formación de hemoglobina y mioglobina, proteínas que ayudan a transportar el oxígeno a los músculos y órganos. Los tomates lo consiguen con vitamina C. Una taza de tomates contiene el 27% de la dosis diaria recomendada de esta vitamina.
5. Los tomates ayudan a que las heridas sanen más rápido
La vitamina C también es importante en la formación de colágeno, una proteína que se encuentra en los tejidos conectivos y que ayuda a curar las heridas.
La ingesta regular de vitamina C puede ayudar a tu cuerpo a sanar después de cortarte, recuperarte de una cirugía o tener una úlcera de decúbito. Un estudio de 2016 encontró que los pacientes que tomaron 1000 miligramos de suplementos de vitamina C tuvieron una cicatrización más rápida de las heridas.
